Vivir en Montjuïc. Memorias de un barranquismo olvidado

Diseño Gráfico

Eurecat-Centre Tecnológic de Catalunya

2020

A lo largo del siglo XX Barcelona se convirtió en un polo de atracción para muchas personas que querían mejorar sus condiciones de vida. En esta ciudad en constante transformación no faltaban las oportunidades, lo cual supuso la llegada masiva de inmigrantes a una urbe en la que era más fácil encontrar trabajo que un lugar donde vivir. Durante la década de 1950 más de 60.000 personas, procedentes de todas las partes de la Península, se vieron abocadas a vivir en infraviviendas. Tan solo en Montjuïc, en 1957 había censadas 6.090 barracas que alojaban a unas 30.000 personas.

Esta exposición nos acercó a este pasado de la metrópolis a través de los recuerdos y las vivencias de quienes se vieron obligados a vivir en barracones mientras trataban de alcanzar mejores condiciones de vida, diferenciándose dos ambientes. El primero se planteó como una panorámica global de la ciudad de Barcelona contemplada desde el interior de una barraca. En ella el espectador-habitante observaba desde el hogar los cambios que se fueron sucediendo en la metrópolis mediante recursos gráficos, como planos e imágenes. Este ámbito estaba subdividido por tres pórticos de hierro que funcionaban, de manera simbólica, como jerarquía de los espacios habitables: la casa, la barraca, la habitación. El color de estas puertas se basó en la revista La voz de la montaña. El segundo ámbito representaba el exterior de la calle de una barraca, con una hilera de casas de autoconstrucción a cada lado representadas mediante módulos de diferente tamaño y volumen en el que se instalaba la gráfica. El material escogido para la recreación fue la madera y el cartón Reboard que sirvieron para potenciar la idea de home-made.

Trabajo realizado: Conceptualización. Diseño museográfico, diseño gráfico, diseño de iluminación. Producción y montaje.

Fotografías: José Luis de la Parra.